Entre las mujeres que llevaron perfume a la tumba de Cristo, María
Magdalena es la única de la cual
celebramos memoria. Cristo había expulsado de ella siete demonios para dar
cabida a los siete dones del Espíritu. Su perseverancia en permanecer cerca de
la tumba le ha valido la visión y la conversación con los ángeles, y después de
haber visto al Señor, se convierte en su apóstol ante los apóstoles. Instruida y
plenamente avalada por la boca misma de Dios, les anuncia que ha visto al Señor
y les repite lo que le dijo.
María Magdalena precede en dignidad a Pedro, el jefe de los apóstoles, y a
Juan, el discípulo muy amado de Cristo; por tanto, ella ha sido más favorecida
que éstos. Ellos, cuando se acercaron al sepulcro, no vieron más que las vendas
y el sudario; pero ella, que había permanecida hasta el final con un firme
esperanza en la puerta de la tumba, ha visto, antes que los apóstoles, no solo
a los ángeles sino al mismo Señor de los ángeles resucitado en la carne. Ha oído
su voz y así Dios se ha servido de su palabra.
S. GREGORIO PALAMAS
Teólogo bizantino. (1296 1359)
Al levantarse la aurora con la luz pascual de Cristo,
La Iglesia madrugadora te pregunta: “¿A quién has visto?”
“Porqué lloras en el huerto?¿A quién buscas “A mi amado.
Buscando al que estaba muerto, lo encontré resucitado.
Me quedé sola buscando, alas me daba el amor,
Y cuando estaba llorando, vino a mi encuentro el Señor.
Vi a Jesús resucitado, creí que era el jardinero;
Por mi nombre me ha llamado, lo reconocí primero.
Él me libró del demonio, yo le seguí hasta la cruz,
Y di el primer testimonio de la Pascua de Jesús”.
Haznos, santa Magdalena, audaces en el amor,
Irradiar la luz serena de la Pascua del Señor.
Bernardo VELADO GRAÑA
Creo que santa María Magdalena, era una discípula normalita, que, como los Apóstoles, no llegó a comprender a Jesús, no era una buena oyente; estaba "enamorada " de Jesús sin conocer a Jesús; lo buscaba y no lo encontraba; pero perseveró en su búsqueda y, al final lo encontró; fue el propio Jesús Quien le dijo en donde debía buscarlo...Lo buscaba en el jardín y lo tenía en su corazón...creo que era una alumna que no escuchaba con atención la Palabra, que no entendía las teorías del Señor... Pedro tampoco lo entendía ;pero estaba bien con Él, y lo mismo Juan y los otros Apóstoles. Os deseo que paséis un feliz y santo verano.
ResponderEliminarAfma. MºJosé
Efectivamente me parece que María Magdalena no era una "ilustrada". También Dios ama a los sencillos y abandonados. Pero ella tenía sed de amor, lo buscó en los hombres, y seguramente se desilusionó. Y cuando vio y escuchó a Jesús, se deslumbró. Bendita Santa María Magdalena.
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