Es significativo que el libro de los Hechos de los Apóstoles, que narra los inicios de la Iglesia , empiece con la ascensión de Jesús a los cielos. Por una parte, esta fiesta suscita en nosotros la nostalgia por el Señor que es glorificado a la derecha del Padre. Por otra, nos recuerda que la obra de Cristo ha de ser completada con la misión de la Iglesia. Jesús sube al cielo pero no abandona a los hombres..Por eso, Jesús ha capacitado a los Apóstoles y a los creyentes para construir el cuerpo de Cristo, que es la Iglesia. Pero Jesús no solo encarga un trabajo sino que también da fuerza para cumplirlo y por eso promete el Espíritu Santo.
David AMADO FERNÁNDEZ
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminar