jueves, 28 de julio de 2016

¿POR QUÉ TENER MIEDO?.


Hijos míos, pase lo que pase, recordad que yo estoy siempre con vosotros. Acordaos de que, visible o invi­sible, despierto o dormido, vigilo siempre, estoy por todas partes, soy todopoderoso. No tengáis jamás ningún temor, ninguna inquietud: estoy ahí, vigilo, os amo, lo puedo todo... ¿Qué más hacer por vosotros?... Acordaos de las tempestades, cuando erais tranqui­lizados con una palabra, haciendo suceder una gran calma. Tened confianza, fe, y coraje; no os inquietéis por vuestro cuerpo y vuestra alma, pues yo estoy ahí, todopoderoso, y amándoos.

Pero que vuestra confianza no nazca de la dejadez, de la ignorancia de los peligros, ni de vuestra confianza o la de otras criaturas. Los peligros que corréis son inmi­nentes: los demonios, enemigos fuertes y astutos, vues­tra naturaleza pecadora y el mundo mismo os harán una guerra encarnizada. Y en esta vida, la tempestad es casi constante, y vuestra barca está siempre a punto de zozobrar. Más no olvidéis que estoy ahí, con voso­tros, iesta barca es insumergible! Desconfiad de todo, sobre todo de vosotros, pero tened una confianza total en mí, que he desterrado toda inquietud.


Beato Carlos de Foucauld

No hay comentarios:

Publicar un comentario